Agustín es un adolescente rosarino que decidió contar públicamente su caso de ludopatía para ayudar a que otros chicos no pasen por lo mismo que él y reciban ayuda frente a la adicción al juego y las apuestas. En diálogo con El Tres, contó que todo empezó en 2023, cuando tenía 18 años y el plan de ir al casino con sus amigos era “pasarla bien, entre comillas”.
“Jugando y apostando poco. Ese fue el principio, jugando dos mil o tres mil pesos. A las dos semanas, ya era yo el que invitaba, era mi plan. En ese momento trabajaba en el Hospital Provincial, cobraba mi sueldo. Ahí no era una obsesión”, dijo.
�� LUDOPATÍA EN PRIMER PERSONA: "JUGABA PLATA QUE NO ERA MÍA"
— De12a14 (@De12a14) June 4, 2025
Agustín tiene solo 19 años y se animó a contar su historia para visibilizar una problemática que crece en silencio
Llegó a sacar préstamos, a apostar dinero que no era suyo y a vivir bajo presión constante.
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Sin embargo, al poco tiempo, esa actividad, que antes era ir a pasarla bien y divertirse con sus amigos, se transformó en una adicción: “Me llevó a estar deprimido, vivir bajo presión y no poder tener mi plata. Ahora me doy cuenta, pero dos meses atrás me jugaba sueldos enteros, plata que no era mía, vendía cosas para jugar cuando no tenía”.
Desde hace un tiempo, se acrecentó la preocupación por el avance de las apuestas deportivas, los casinos online y las loterías virtuales entre los adolescentes. Es que cada vez son más los chicos que timbean a través de su smartphone o computadora y el fenómeno está en el centro de atención de padres, escuelas, especialistas en salud mental y funcionarios.
Fondo
Para Agustín, el avance de la ludopatía en su vida fue progresivo, cada vez apostaba más dinero y hasta llegó a pedir préstamos. “Uno pone un freno cuando toca fondo y se da cuenta de que le erró. Un lunes, un mes atrás, tenía que poner una plata grande y no la tenía, nadie de mi familia sabía lo que pasaba. Tuve que contar la verdad, buscando la forma de solucionar los problemas”, explicó. El juego lo llevó a “perder muchas cosas” y también a un aprendizaje que hoy, de alguna manera, puede rescatar del padecimiento: “Busco sacar algo bueno de todo esto y que a ningún otro chico de mi edad le pase lo mismo, que puedan ver cómo se termina, que es mal y fallándole a la gente que más lo quiere”. El adolescente sostuvo que la adicción al juego “lleva a la mentira, a entrar en un círculo vicioso” y contó que le mintió durante mucho tiempo a su mamá. “Pobre, le oculté lo que me pasaba, te lleva a mentir y muchas cosas feas. Te hace pasar momentos de mierda”, reconoció. “Al final uno no juega por necesidad de ganar plata, juega por la adrenalina, ver qué carta o número sale, a otros ver cómo tira la máquina. Solo por el hecho de ver qué va a pasar, el azar. Yo jugaba blackjack y ruleta”, agregó. “Hay muchos chicos en las escuelas que juegan y apuestan como un pasatiempo. Así empecé yo”, explicó Agustín acerca del crecimiento del juego online en los colegios, que en muchos casos representa el comienzo de todo. “Sorprende la gente de mi edad que veía, chicos que uno se da cuenta que son menores”, reveló el adolescente rosarino sobre sus idas al casino de zona sur. Después de tocar fondo, Agustín siente que ahora está contenido por su familia y sus amigos, pudo iniciar un tratamiento psicológico y “de a poquito” va repuntando y tratando de salir: “Gente que pensaba que no me iba a ayudar, al enterarse lo hicieron, no estaba tan solo como yo pensaba”. “Al chico que está apostando le digo que mucha gente lo va a juzgar y no lo va a entender, pero hay más gente que lo va a ayudar. No están solos, esto es pasajero. Estoy con muchas ganas de salir adelante y ayudar a los chicos que pasan por lo mismo, pueden hablarme a mi Instagram o mi WhatsApp”, dijo. Tras contar su historia en El Tres, el chico expresó que se siente “aliviado” porque ya no le oculta nada a nadie. “Mucha gente se va a enterar por este momento al salir en vivo. Quiero que este alivio lo sientan otros chicos que están apostando. Sé lo que es estar desesperado y sentir culpa por perder plata. Te sacás una mochila de encima”.Ayuda