El Benfica de Ángel Di María y Nicolás Otamendi sufrió otro revés en el cierre de la temporada del fútbol europeo. Este domingo perdió la final de la Copa de Portugal ante Sporting de Lisboa, el mismo equipo que días atrás le arrebató el título de liga, y al rosarino se lo vio conmovido y llorando desconsoladamente tras la derrota, en medio de los rumores de un posible regreso a Rosario Central cuando finalice el Mundial de Clubes, la última competencia que disputará con su actual club.

 
Benfica tuvo la victoria al alcance de sus manos tras pasar al frente en el segundo tiempo por un gol de Orkun Kökçü. Sin embargo, Viktor Gyokeres lo empató de penal en el minuto 11 de tiempo añadido y así envío el encuentro al alargue.

Allí, el campeón del torneo local fue más fuerte, aprovechó el envión del empate agónico y se quedó con la victoria con goles de Conrad Harder y Francisco Trincao para el 3-1 definitivo.

Fue el último encuentro de Di María con la camiseta del Benfica en suelo portugués. Angelito ya anunció que dejará el equipo cuando termine la temporada, luego de jugar el Mundial de Clubes en Estados Unidos. 

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Con 37 años y una trayectoria plagada de éxitos en clubes como Real Madrid, Paris Saint-Germain y la selección argentina, Fideo se encuentra meditando una decisión sobre su futuro: continuar su legado en otro equipo de Europa, unirse a Lionel Messi en la MLS o cumplir el sueño de los hinchas de Rosario Central.

Sin embargo, entre los rumores se habla también de la posibilidad del retiro de la actividad profesional para volver a vivir en la Cuna de la Bandera. 

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